🐵 “La verdad mas grande y mas oculta de este mundo es que nosotros mismos somos los que lo concebimos así como es y de la misma forma lo podriamos hacer de otra manera.”
–David Graeber referenciado por Adam Curtis en su documental Can't Get You Out of My Head (2021)
🙉 Alexander Ebert, "Truth" (concierto de Edward Sharpe And The Magnetic Zeros, Big Top, LA, Oct. 2013)
🙈 Joe Webb, “Space Race”
La inmensa creación de moneda durante el Covid, el endeudamiento de las naciones y la cancelación de las deudas de parte del FMI confirma que hasta los elementos más tangibles de nuestra realidad, como el dinero, lo suelen ser solo para algunos de nosotros.
Años noventa, yo niña, no llego entender porque la miseria existe. Pregunto, lógicamente, a mi mamá: “¿Porqué no creamos más dinero?”
No me parece necesario demorarse con el porqué de las cosas monetarias; es bastante evidente: cuando uno quiere manipular un comportamiento solo hay que proponer dos opciones posibles que caben no obstante adentro del comportamiento que se trata de imponer. Es una diversión que tiende a dar la impresión que hay una opción cuando, de hecho, una coerción está impuesta. Eso es una de las técnicas de educación positiva: cuando un niño no quiere comer, se le ofrece papas o postre. La oposición entre tener o no tener dinero se ubica dentro de un mismo tipo de autoridad: no hay alternativa mas que para los que deciden.
Niña todavía, veía una caricatura con episodios mostrando la “guerra” contra los microbios, la célula-“fábrica” y los “ataques” de los anti-cuerpos. El uso de un vocabulario industrial y guerrero para contar el funcionamiento del cuerpo humano refleja una época que percibe lo que nos pasa, y al medio ambiente, como algo que se tiene que controlar, domesticar, dominar y explotar, como algo externo y adverso. Y no es la tercera guerra mundial contra el Covid no me haría decir lo contrario.
Según la fórmula de Lewis Carroll en Alicia en el País de las maravillas, la imaginación es la única arma contra la realidad. Las historias son todo lo que tenemos y todo lo que nos construye. Es evidente que un·a niño·a creciendo con una visión mecánica de la creación no ve el mundo de la misma forma que un·a niño·a creciendo con la idea de que, en el origen, el mundo estaba sobre la espalda de una tortuga.
Algunos pueblos de América del Norte cuentan la historia de la mujer del cielo que estaba tan curiosa de conocer al universo que se puso a rascar, rascar y rascar la bóveda del cielo hasta que se hizo un hoyo tan grande que se cayó en élo. En ese momento, sobre el planeta tierra, había sólo agua, agua por todos lados y muchos animales. Cuando vieron a la mujer del cielo caerse, realizando que su caída iba a crear un cataclismo, los animales se reunieron en consejo. Los pájaros tuvieron el rol de amortiguar su caída mientras que la tortuga fue la reclutada para recibirla. Ya instalada sobre la espalda de la tortuga, los animales se dieron cuenta que la mujer del cielo estaba embarazada. Pronto hubo que buscar más espacio para su progenitura. La mujer del cielo supuso: al fondo del océano debía de haber tierra. Entonces, uno a uno, los animales bucearon y se fueron a buscar el fondo del océano. Varios casi acabaron muertos hasta que la rata almizclera subió desmayada con un poco de tierra guardada en su mano. Poco a poco, los animales amontonaron la tierra y es así que la Tierra fue creada.
La diferencia entre un entendimiento prosaico (en prosa) del mundo y un entendimiento poético es una diferencia de gusto (por la vida), no se trata de una realidad radicalmente distinta. Lo que quiero decir aquí es que no hay otra realidad que la que podemos ver o que elegimos entender en un dado momento. Cambiamos de percepción sobre los eventos y las cosas en el transcurso de una vida y hasta a veces en el transcurso de unos segundos. ¿Será que nos mentiremos a nosotros mismos? Yo creo que más bien evolucionamos y que eso es un proceso mucho más sano que de quedarse encajados con ideas fijas. Eso me acerca a decir que la realidad no existe, no realmente. Quizás podríamos decir que es múltiple.
“La mitología no es mentira; es poesía, es metáfora. Se señaló muy acertadamente que la mitología es la penúltima verdad –penúltima porque la última verdad no se puede comunicar con palabras. (…) La mitología guía el espíritu (…) hacia lo que puede ser conocido pero que no puede ser dicho.”
– Joseph Campbell, The Power of Myth (1988)
Es la misma diferencia que la que existe entre la lectura literal de una partitura de música y la exploración del alma de esa misma partitura, es decir, de lo que el compositor quiso transmitir. La música de Mahler, por ejemplo, esta empapada de la condición del hombre moderno: de las exterminaciones del siglo XX y de la ciencia nuclear. Esa musica puede transmitir su poder transformador únicamente cuando el jefe de orquesta sabe que la manera para el compositor de trascender esa condición “moderna” era encontrar el niño en cada uno de nosotros, el niño que nunca hubiera dejado de existir. Así se entiende porque en su primera sinfonía Titán empieza el tercer movimiento con una versión en modo menor, como una marcha fúnebre, de Martinillo, introducida con un contrabajo y su voz roncando como la del adolescente dirigiendose hacia la edad adulta, dejando el·la niño·a que era atrás de el·la.
A otro nivel, la partitura disonante del alma humano en el mundo moderno es, muy en seguida, entendida como una division. Hablo de los que la sociedad contemporánea califica con los términos “esquizofrénicos”, “bipolares” y “depresivos” que refiere más bien a personas que no son enfermas pero que tienen una reacción normal ante condiciones anormales. En otros calendarios y otras geografias, se les llaman Jesus, Mahoma, Juana de Arco, chamanes o curanderos a los humanos que tienen la capacidad de navegar entre los mundos y de comunicarse con lo invisible cuando están frente a situaciones críticas. Es una forma de sabiduría y es el trabajo de una vida lograr convertir en arte las voces, las imágenes y las emociones que uno no se puede impedir percibir –para que el invisible vuelve a ser el guion legitimo de la realidad.
Algunas de las fuentes que inspiraron este boletín:
Thomas King, cuenta-cuentos indígena norte-americano (The Truth about Stories: A Native Narrative, 2003)
la red internacional Escuchando voces que acompaña, educa y promueve un entendimiento distinto de la escucha de voces mas alla de la estigmatizante “esquizofrenia”
Kelly Brogan, psiquiatra norte-americana renegada (Own Your Self, 2019)